Tradición, modernidad y artesanía definen hoy a la Bodega Sant Pere de la Cooperativa de Moixent, en la provincia de Valencia. Fieles a nuestros orígenes, que se remontan a 1950, estamos atravesando por la cuarta generación de vinicultores, apasionados por las uvas y vinos de calidad.
Nuestra Bodega es de tamaño medio y en ella transformamos en vino unos 400.000 Kg de uva de variedades autóctonas. Disponemos de unas cuidadas instalaciones con depósitos de hormigón y procuramos una minuciosa elaboración artesanal que hemos seguido cuidando a lo largo de los años.
Desde su construcción en 1950 elaboramos nuestros vinos de la misma manera, usando lo tradicional y acoplándonos a los nuevos tiempos y las nuevas técnicas.
Situada al sur de la provincia de Valencia, la nuestra ejemplifica por qué las Cooperativas de pequeñas localidades son tan especiales en España. Y es que nuestros socios-agricultores siguen empeñados en cultivar la viña como lo hacían sus bisabuelos, mimando la planta, amando cada palmo de tierra….
En la actualidad, estamos elaborando unos vinos modernos y elegantes, con un corte claramente Mediterráneo, que se sitúan dentro de los preferidos y mejor valorados por los grandes amantes de los vinos y que satisfarán los sentidos de quienes los prueben.
Moixent presume de contar con un microclima especial, un paisaje y un suelo donde se crean las condiciones necesarias para que nazcan los mejores caldos de la Comunitat Valenciana. Englobada dentro de la Asociación “Terres dels Alforins” (Moixent-Fontanars-La Font de la Figuera), nuestra bodega comparte dichas bondades con algunas de las mejores bodegas valencianas.
En el interior de la bodega contamos con noventa depósitos de hormigón en uso y unas sesenta barricas de roble americano y francés, que junto con la calidad excepcional de la uva que producimos nos permiten elaborar unos vinos excelentes, amparados todos ellos por la DO Valencia. Las manos expertas de nuestros socios-agricultores tratan con mimo cada una de las cepas. De ello también depende la calidad de nuestros caldos.
Gracias al hormigón, logramos controlar mejor la temperatura. Además, se producen pequeñas microoxigenaciones naturales en su interior que nos ayudan a conseguir unos vinos más redondos y estructurados.
Los nuestros son vinos mediterráneos frescos, elaborados en depósitos de hormigón y con largas crianzas en hormigón sobre lías. Son vinos elaborados con mucho respeto por las variedades y nuestro entorno, transmitiendo nuestro paisaje de una forma muy sencilla, son vinos desconocidos que sorprenden a la gente que nos descubre.